Mi nombre es José Luis López Martín y soy propietario junto con mi hermana María del Mesón Restaurante La Cueva, uno de los restaurantes con más solera de San Lorenzo de El Escorial.
He vivido la hostelería desde que nací, ya que vine al mundo en el mismo restaurante porque mis padres fundaron el restaurante un domingo de Ramos del año 1961, tenían la vivienda en el mismo restaurante, en una época en la que todavía nacíamos en las casas asistidos por la matrona.
A los 18 años me fui a Madrid a estudiar turismo y posteriormente abrí una discoteca y un bar de copas, a la vez que ayudaba y aprendía la gestión del restaurante al lado de mi padre.
Para el año 2000 y como he dicho antes, junto con mi hermana dirigir el restaurante.
En estos 22 años que llevo al frente del restaurante he crecido como profesional y como persona aprendiendo a gestionar con cabeza de las épocas boyantes y para poder mantener el buen funcionamiento del restaurante en las épocas difíciles que nos ha tocado vivir, como la crisis económica del año 2008, o como la pandemia del Covid más reciente.
La Cueva es un restaurante familiar y no digo esto solo porque sea propiedad de una familia sino porque tenemos un fantástico equipo trabajando en el que hay personas que llevan en el restaurante más de 35 años, otros llevan 30, otros llevan veintimuchos, etcétera.
Es un restaurante que elabora una cocina típicamente castellana basándose en la calidad de los productos y en un equipo de sala con una gran profesionalidad y saber hacer.
Estamos enfocados a una clientela familiar tanto de San Lorenzo de El Escorial como de Madrid capital y alrededores, aunque también tenemos una parte muy importante del negocio enfocada a numerosas agencias de viajes de todo el mundo recibiendo a miles de extranjeros de muy diversos países como Francia, Italia, Alemania, Suecia, Bélgica, incluso Taiwán.
Otra parte también muy importante del negocio se basa en la celebración de eventos de empresas tanto nacionales como internacionales.
Para mí personalmente la Cueva es una parte fundamental de mi vida pues además de haberme formado profesionalmente me ha brindado la oportunidad de haber conocido a lo largo de estos años a muchísimas personas fantásticas, hacer muchos amigos y a disfrutar de esta magnífica profesión que es la hostelería.